El feminismo islámico es el feminismo como lo conocemos en el resto del mundo, con principios universales que reivindican la libertad, la emancipación y la dignidad para las mujeres. Es islámico porque se refiere a unos principios que están en nuestra cultura acerca del mensaje espiritual que enseña el islam. A la pregunta sobre la unión entre el feminismo y el islam -teniendo en cuenta que el islam está visto como una religión discriminatoria hacia las mujeres-, hay que decir que cuando hablamos de religión, hablamos de sistema, de una ideología religiosa y de una institución religiosa, pero también de un mensaje espiritual, que existe dentro de todas las religiones. Lo que ha traído la discriminación de las mujeres son las instituciones religiosas y el sistema religioso, no el mensaje. Nosotras queremos reivindicar los derechos a partir de este mensaje espiritual y luchar contra las instituciones religiosas, que son las que han hecho una lectura patriarcal del mensaje espiritual.
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Dentro del feminismo hay modelos diferentes y también principios universales que todas compartimos. Hay que saber diferenciar entre modelos y principios. Los principios universales son la lucha por la emancipación de las mujeres, por la dignidad y por la igualdad. Es por eso que, al igual que hay feminismo radical, feminismo de Estados Unidos o black feminism, existe el feminismo islámico.
Como movimiento, es relativamente nuevo y plural; no hay un único feminismo islámico, ya que existen distintas corrientes, por ejemplo, las que reniegan del título de ‘feminismo’ dada la connotación negativa occidental que tiene. En cualquier caso, es una cuestión de conceptos, no de principios.
El feminismo islámico surgió de forma espontánea en los años 80, a raíz de la reflexión y del estudio por parte de mujeres musulmanas de todo el mundo, y emergió con fuerza en los 90. No es un movimiento que nace en una sola parte del globo; destacó en Egipto, en Irán, en Marruecos, en Túnez, sin olvidarnos de los países más grandes del mundo musulmán: Indonesia y Malasia, donde existe un movimiento muy importante. También tomó cuerpo en comunidades islámicas aisladas en otros países, pero fue más difundido en Estados Unidos, donde las mujeres tienen estudios superiores.
Si bien comenzó en los 90, no lo hizo de la nada; es la continuación del feminismo nacionalista árabe, que cobró importancia entre los años 40 y 50 y bajo el que las mujeres lucharon codo con codo con los hombres por la descolonización. Después de la independencia, fueron marginadas y el feminismo nacionalista quedó muy ausente. En los 50, nació el feminismo laico antirreligioso, que no llegó a dar sus frutos porque el pueblo árabe está arraigado en el Islam y este constituye una memoria, una historia, una experiencia milenaria que no puede abandonar. La generación joven, la que ha seguido y ha tenido acceso al estudio del islam, ha visto que lo que decían las feministas laicas no era del todo cierto, que la lectura que las instituciones han hecho de los textos sagrados, todas controladas por hombres, es la responsable de la marginación de las mujeres.
Muchas mujeres musulmanas, recuperando su responsabilidad califal, han comenzado a releer los textos sagrados y afirman que lo que encierran es un mensaje espiritual que, al contrario de lo que se dice, está liberando y ha liberado a las mujeres. Es, pues, un mensaje liberador y emancipador. A partir de esta percepción, las feministas islámicas también utilizan argumentos religiosos para luchar contra los ulemas e imanes que sostienen lo contrario.
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¿Qué es?
El feminismo islámico es:
- El feminismo como lo conocemos en el resto del mundo.
Reivindica para las mujeres:
- la libertad
- la emancipación
- la dignidad
- Es islámico porque se refiere a unos principios (valores básicos)
- que están en nuestra cultura sobre el mensaje espiritual que enseña el Islam.
¿El feminismo y el Islam son compatibles?
El Islam está visto como una religión que oprime a las mujeres.
Pero la religión está formada por:
- un sistema
- ideas y convicciones religiosas
- una institución religiosa
- un mensaje espiritual, que existe dentro de todas las religiones.
Lo que ha traído la discriminación de las mujeres
son las instituciones religiosas y el sistema religioso, no el mensaje.
Nosotras queremos reivindicar nuestros derechos
a partir de este mensaje espiritual.
Queremos luchar contra las instituciones religiosas
que han transformado el mensaje espiritual
en la creencia de que los hombres son superiores a las mujeres.
¿El feminismo islámico es un nuevo modelo de feminismo?
Dentro del feminismo hay modelos diferentes
y también principios que todas compartimos.
Hay que saber diferenciar entre modelos y principios.
Los principios que todas compartimos
son la lucha por la libertad de las mujeres,
por la dignidad y por la igualdad.
Y hay diferentes modelos de feminismo
que defienden esos valores desde su propia realidad.
Por eso existe, por ejemplo:
- el feminismo radical
- el feminismo de Estados Unidos o Black Feminism (feminismo negro)
- el feminismo islámico
El feminismo islámico es bastante nuevo.
Y también es muy diverso.
No hay un único feminismo islámico, existen distintas corrientes.
Por ejemplo, algunas no quieren llamar a su movimiento “feminismo”
porque es una palabra occidental y no les convence.
En cualquier caso, es una cuestión de conceptos, no de principios.
¿Cómo surgió el feminismo islámico?
El feminismo islámico surgió de forma espontánea en los años 80,
fruto de la reflexión y del estudio de mujeres musulmanas de todo el mundo.
Emergió con fuerza en los 90.
No es un movimiento que nace en una sola parte del mundo;
pero sobre todo destacó:
- en Egipto
- en Irán
- en Marruecos
- en Túnez
- en los países más grandes del mundo musulmán:
Indonesia y Malasia, donde existe un movimiento muy importante.
Se difundió más en Estados Unidos,
donde las mujeres tienen más estudios superiores.
¿Qué raíces tiene el feminismo islámico?
El feminismo islámico nació en los 90, aunque no surgió de la nada.
Es la continuación del feminismo nacionalista árabe,
que fue muy importante en las décadas de los años 40 y 50.
Entonces las mujeres lucharon codo con codo con los hombres
por la descolonización
(el proceso hacia la independencia de los pueblos y territorios
sometidos a dominación política, social y económica por parte de otros países).
Tras lograr la independencia, fueron excluidas
y el feminismo nacionalista quedó invisibilizado.
En los 50, nació el feminismo laico antirreligioso,
que no llegó a dar sus frutos
porque el pueblo árabe estaba enraizado en el Islam.
El Islam constituye una memoria, una historia
y una experiencia milenaria que no se puede abandonar.
¿Y qué pasa ahora con el feminismo islámico?
La generación joven ha tenido más acceso al estudio del Islam.
Por eso, ha visto que lo que decían las feministas laicas
no era del todo cierto.
Ha identificado que las instituciones son las responsables
de la exclusión de las mujeres, porque están todas controladas por hombres
que han hecho una interpretación machista de los textos sagrados.
Muchas mujeres musulmanas han vuelto a tener responsabilidad religiosa
y han comenzado a releer los textos sagrados.
Afirman que los textos tienen un mensaje espiritual
que, al contrario de lo que se dice,
está liberando y ha liberado a las mujeres.
Es, pues, un mensaje liberador y emancipador.
Con esa mirada, las feministas islámicas también utilizan argumentos religiosos
para luchar contra las personas que sostienen lo contrario,
como los estudiantes del Islam
y algunas personas que dirigen la oración colectiva.