La Convención Internacional sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad (Naciones Unidas, 2006) define la doble discriminación por motivos de discapacidad como "cualquier distinción, exclusión o restricción por motivos de discapacidad que tenga el propósito o el efecto de obstaculizar o dejar sin efecto el reconocimiento, goce o ejercicio, en igualdad de condiciones, de todos los derechos humanos y libertades fundamentales en los ámbitos político, económico, social, cultural, civil o de otro tipo. Incluye todas las formas de discriminación, entre ellas, la denegación de ajustes razonables". Leer más...
Doble discriminación por motivos de discapacidad
¿Qué es?
Es el hecho de que las mujeres con discapacidad
son víctimas de discriminación doble o múltiple,
es decir, que se encuentran entre los grupos más excluidos
en nuestra sociedad.
¿Por qué ocurre?
No se tiene en cuenta la situación especifica de las mujeres con discapacidad en:
Hoy en día persisten las desigualdades entre mujeres y hombres
y eso también concierna las mujeres con discapacidad.
Por otro lado, sabemos que las personas con discapacidad
no disfrutan de igualdad de oportunidades
en la mayoría de las cuestiones importantes en la vida.
El hecho de ser una mujer con diversidad funcional
hace que la situación sea aún más desfavorable.
¿Qué consecuencias tiene?
Buena parte de las normas legales y de las acciones a favor de la igualdad
hacen un llamamiento a tener en cuenta las situaciones de las mujeres
sujetas a discriminación múltiple,
por cuestión de raza, religión, discapacidad, opción sexual, etc.
A pesar de ello, las mujeres con discapacidad siguen siendo ignoradas
en la realidad.
Existe una desventaja de las mujeres con discapacidad
frente a los hombres con discapacidad
y frente al resto de las mujeres y de los hombres,
en prácticamente todas las esferas de la vida:
Estas dos causas de discriminación social,
ser mujer y tener una discapacidad, se cruzan.
La consecuencia es que la discapacidad amplifica las desigualdades
entre mujeres y hombres.
Además, a la vez, sufren de unos nuevos prejuicios;
es decir, ideas, imágenes y conceptos preconcebidos sobre ellas.
Los atributos, los roles y los valores
tradicionalmente asignados al género femenino son cuestionados
cuando se trata de mujeres con discapacidad.
Se piensa que no van a poder realizar igual de bien:
Las mujeres con discapacidad tienen más dificultad de acceso
a los movimientos de autoayuda y a los movimientos sociales
por esta doble discriminación.
No se han sentido suficientemente convocadas ni representadas
por las organizaciones feministas ni en las reivindicaciones de las asociaciones
a favor de la igualdad.
Por su parte, sus compañeros varones
en las organizaciones del ámbito de la discapacidad
no creen que son más discriminadas por ser mujeres.
Tampoco consideran una prioridad
el empoderamiento de las mujeres con discapacidad.
De hecho, los hombres siguen teniendo más poder
en las organizaciones del ámbito de la discapacidad.
Otra consecuencia es el alto riesgo de las mujeres con discapacidad
a ser víctimas de violencia de género
y a sufrir maltrato debido a la discapacidad.